El Museo de Zaragoza prácticamente desde sus orígenes es custodio de una larga colección de restos arquitectónicos y decorativos procedentes del palacio taifal de la Aljafería que se han ido sometiendo paulatinamente a largas labores de estudio, catalogación y conservación. Parte de estos materiales estuvieron expuestos hasta hace unos años en la sala de arqueología medieval de nuestro centro. En estos momentos las principales piezas se exhiben en el propio palacio de la Alfajería, como depósito temporal del museo en la sede de las Cortes de Aragón, el monumento más concurrido de Zaragoza con cifras que superan los 180.000 visitantes al año.
Dos de estos objetos han viajado hasta la Alhambra de Granada donde forman parte de una exposición titulada “Arte y Culturas de al-Andalus. El poder la Alhambra” organizada por diversas instituciones andaluzas para conmemorar el primer milenario de la creación del Reino de Granada. También se ha trasladado hasta allí una pequeña escultura de bronce con forma de cabeza de león. La exposición ubicada en diversas dependencias de la Alhambra fue inaugurada el pasado 2 de diciembre y permanecerá abierta hasta el 2 de marzo de 2014.
El título de la muestra hace referencia a la diversidad de culturas que conformaron la herencia de mundo islámico peninsular a partir del siglo XI y hasta el XV, allí se exhiben los logros alcanzados en este periodo a través de testimonios materiales de gran calidad que permiten unificar la trascendencia del legado cultural del occidente islámico. La elección del palacio de la Alhambra como contenedor expositivo facilita que las piezas, originarias de toda España, puedan dialogar con ese grandioso monumento y expresar la diversidad dentro de la unidad cultural en ese epílogo de la civilización andalusí.
En concreto, las dos piezas de la Aljafería seleccionadas por los comisarios de la exposición formaban parte de la ornamentación arquitectónica de yeso tallado del palacio, son un tablero con decoración de ataurique (116×36 cm) que engalanó una de las estancias contiguas al salón del trono y una celosía de complejo trazado geométrico (54×93 cm) cuya ubicación original se desconoce.
Por último, la pieza de bronce (9×7, 5 cm) que representa una cabeza de león perteneció al remate de un incensario, tiene una gran interés por ser una de las pocas figuras naturalistas de época andalusí encontradas en Zaragoza, en concreto en la calle Sobrarbe. Está hecha a molde y cincelada, presenta una extraordinaria semejanza formal con los leones de mármol que sostienen la famosa fuente de la Alhambra.
Estas obras son las tarjetas de visita del rico legado islámico del que disfruta Zaragoza y su museo que en este marco granadino se contextualiza con los más importantes ejemplos de arte andalusí de la Península Ibérica, entre los que destaca por su trascendencia cultural e histórica el palacio de la Ajafería.
Museo de Zaragoza
